Yace ahí
boqueando
boqueando
aleteando la arena...
Pobre!
Que el más valiente
le entierre el arpón
o tenga piedad y
o tenga piedad y
lo devuelva al agua.
Yace ahí el resto
de nuestro amor.
Seré valiente pues
la piedad
no es para los amantes
Euge Lépori